En poco más de un año, la Extreme E dará sus primeros pasos. Se trata de una categoría compuesta por vehículos SUV 100% eléctricos, cuyo objetivo es concientizar acerca del cambio climático y las complicaciones que ello trae a la humanidad.

La especialidad, liderada por Alejandro Agag, CEO de la Fórmula E, confirmó su primer escenario: Groenlandia. Nada menos que la isla ubicada en el norte del Océano Atlántico será sede de una carrera de autos, por primera vez en su historia.

“Estoy muy emocionado de poder llevar el formato de carreras eléctricas único de Extreme E a Groenlandia. Prometí que la categoría rompería las barreras del automovilismo y esta es una prueba”, comentó el español.

Sin precedentes en el mundo del automovilismo, Extreme E contará con SUVs eléctricos que competirán en cinco entornos remotos del planeta, con la misión de utilizar el poder del deporte para resaltar las mayores amenazas climáticas que enfrenta nuestro planeta.

Además de confirmar Groenlandia, que está experimentando las consecuencias del calentamiento global, se están observando otros cuatro sitios que ya han sufrido las consecuencias del cambio climático o la interferencia humana, como el Himalaya, el Desierto, la Selva Tropical y una Isla del Océano Índico. Los problemas que afectan a estos sitios incluyen la deforestación, el aumento del nivel del mar, el derretimiento del hielo glacial, la desertificación y la contaminación por residuos de plástico.

¿Cómo realizar una pista en Groenlandia? Lo explica Peter Wadhams, profesor de la Universidad de Cambridge: “La ubicación que encontramos es ideal. Es un banco de arena hecho de harina de roca que ha sido transportado naturalmente desde un glaciar a lo largo de los años. Las carreras en esta área no tendrán un efecto perjudicial para el medio ambiente, pero la conciencia y la educación potenciales que se pueden generar a través de la poderosa plataforma deportiva serán enormes”.