El pasado fin de semana, en ocasión de la visita del MotoGP a Tailandia, Marc Márquez sumó su sexto título en la categoría reina de las dos ruedas. Ello desató la algarabía en Honda, escuadra con la cual el español ha quebrado cualquier cantidad de récords. Sin embargo, no todo es felicidad en el conjunto nipón: Jorge Lorenzo, compañero de equipo de Márquez desde este año, sigue sin encontrar el rumbo.

Ya habiéndose disputado 15 de las 19 fechas del calendario, el ex piloto de Ducati continúa sin hacer pie con la RC213V, máquina que le ha dado más de un dolor de cabeza. Además, él tampoco se mostró al 100%, debido a lesiones que afectaron su rendimiento tanto a principio de temporada como durante el torneo mismo.

Quien en las últimas horas dio su parecer sobre las dificultades del ibérico fue Stefan Bradl, piloto reserva del equipo asiático. En declaraciones al medio Sport and Talk from Hangar-7, afirmó que presenció el trabajo de Lorenzo en Aragón, más precisamente su informe técnico, tras lo cual aseguró: “Lo siento por él, pero es una batalla perdida. Con esta moto no sabe ni por dónde empezar”.

Además, el tener como compañero de equipo a Márquez, gran dominador del año y que no tiene dificultad alguna en utilizar la Honda, lo “desgasta mentalmente”. Todo ello hace que Lorenzo “no tenga confianza en la moto”, por lo cual le resulta “extremadamente difícil” obtener buenos resultados.

Meses atrás, Lorenzo viajó especialmente a Japón para trabajar en su posición de manejo, lo que en un principio parecía ser el principal problema de su adaptación. Sin embargo, y según afirma el medio AS, Honda trabaja de cara a 2020 en mejorar algunos inconvenientes vistos en el tránsito por curva, expresados por el propio tricampeón de MotoGP.

Foto: Red Bull Content Pool.