La primera vez de Agustín Canapino en el Daytona International Speedway, donde giró con el flamante Cadillac DPI-V.R con el que afrontará junto al Juncos Racing las míticas 24 Horas de Daytona, resultó más que satisfactoria para todas las partes involucradas.
A lo expresado primero por Ernie Gonella, director técnico del equipo, y luego por Ricardo Juncos, propietario de la escuadra, se sumó lo dicho por el propio Canapino, quién tras hablar de lo acontecido en la primera tanda repasó lo que fue el ensayo nocturno: “Fue una experiencia fabulosa, pero también clave para seguir haciendo experiencia, porque la visión cambiaba permanentemente”, destacó por medio de un comunicado de prensa el arrecifeño, que a lo largo del día estuvo arriba del Cadillac cerca de dos horas.
El comienzo del ensayo vespertino no fue el mejor: “Tuvimos algunos inconvenientes, propios de un auto nuevo, y no pude girar con tranquilidad”, señaló sobre un problema en el acelerador. Así lo explicó el propio Juncos: “La fuerza G de frenada era tan grande que el resorte de acelerador no podía sostener el propio peso del pedal, por lo cual mandaba una lectura errónea a la computadora y Agustín no podía bajar los cambios”.
Tras haberlo resuelto, el equipo devolvió al campeón de Turismo Carretera a la pista, donde “completé dos vueltas sin problemas y mejoré el tiempo de la mañana”. Para Juncos no fueron simplemente un par de giros: “Fue impresionante lo que hizo casi sin gomas”, destacó el propietario de la escuadra afincada en Indianápolis.
Canapino giró con éxito en el Cadillac N°50
En general, Canapino destacó que “manejar este Cadillac fue único”. Claro que terminó con algunos dolores en el cuerpo, propios de la inexperiencia de competir en estas máquinas: “Estoy un poco dolorido del cuello porque es mi primera vez en autos de esta potencia, pero voy a poder soportar la exigencia”, aseguró. Por ello, admitió que “me voy a entrenar duro, así llego de la mejor manera”.
Por su parte, Juncos se mostró sorprendido por la adaptación del bonaerense y lo argumentó con datos, al comparar lo hecho por aquel con lo de William Owen, compañero de tripulación y que fue el primero en girar: “Owen es quien tiene la experiencia y después de una hora de andar hizo 1m36s0. Cuando se subió Canapino por primera vez, en la vuelta 10 le igualó el tiempo, y ese registro fue la pole position de 2018”, expresó. Vale mencionar que el proveedor de neumáticos de las últimas 24 Hs. no era el mismo de ayer, lo que pudo haber influido en los tiempos.
La próxima actividad de Canapino en los Estados Unidos será el año próximo. Regresará al país norteamericano el 1° de enero (se espera que su padre Alberto sea parte del viaje), para afrontar las pruebas oficiales de las 24 Horas, a disputarse del 4 al 6 del mismo mes.
Foto: Prensa Agustín Canapino.
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