El español Fernando Alonso (McLaren Honda Andretti) completó este lunes su primer entrenamiento en el Indianápolis Motor Speedway, mítico trazado de la capital de Indiana que acoge la 101º edición de las 500 millas de Indianápolis, con el mejor tiempo de los debutantes y una sesión completa después en la que terminó a poco más de medio segundo del más rápido, el estadounidense Marco Andretti.

El doble campeón del mundo de Fórmula 1 comenzó con buen pie dos semanas de Indy que culminarán el domingo 28 con la carrera, con la pelea por la parrilla el fin de semana anterior (20 y 21 de mayo). Alonso, que tuvo hace dos semanas un primer test para probar su nuevo monoplaza, tardó un par de giros en cambiar el chip y dominar las primeras dos horas de entrenamientos, reservada a los novatos.

El asturiano, que escasas 24 horas antes lograba terminar su primera carrera del Mundial 2017 de Fórmula 1 en Barcelona, tomó los mandos de su auto y en la vuelta 26, de las 35 que rodó, alcanzó la velocidad con la que mandó en la sesión de rookies: 356 km/h.

Alonso pudo ya experimentar las primeras sensaciones de una prueba por la que renunciará al Gran Premio de Mónaco dentro de dos semanas. El asturiano no volvió a la pista hasta mediada la siguiente sesión, ya con todos los pilotos en la misma. El calor y el viento fueron las mayores preocupaciones de un Alonso que pronto escaló posiciones entre los mejores, llegando a colocarse en séptima posición a una hora del final del entrenamiento.

Sin embargo, un problema en la suspensión trasera trastocó el plan de trabajo de un Alonso que aún así cerró con 20 vueltas y una sensible mejora con respecto a su velocidad (358 km/h), decimonoveno en la clasificación general, a 0.5907 segundos, que dominó Andretti con los 364 km/h que alcanzó en su vuelta 31. Scott Dixon y Ed Carpenter fueron segundo y tercero al término del primer día.