El español Fernando Alonso concluyó en cuarta posición en el “Fast Friday”, donde se rueda con la potencia máxima del turbocompresor, de las 500 Millas de Indianápolis, por lo que todavía puede soñar con alcanzar la pole el domingo.
El francés Sebastien Bourdais, que pasó dos temporadas en la Fórmula 1 con Toro Rosso, registró la vuelta más rápida de 375,164 km/h. El galo fue escoltado por el estadounidense Ryan Hunter-Reay, ganador de la legendaria prueba en 2014 y quien estableció 374,318 km/h.
El japonés Takuma Sato fue el tercero más rápido con 373,238 km/h; mientras que Alonso terminó cuarto con 373,009 km/h justo por delante del dos veces ganador de la cita, el colombiano Juan Pablo Montoya.
Así el asturiano, bicampeón del mundo de Fórmula 1, volvió a impresionar al quedar cuarto por tercera jornada consecutiva. Una performance que es para resaltar ya que nunca había pilotado un IndyCar antes de esta semana, con la excepción de una breve prueba a principios de mes.
El esfuerzo impresionó a su compañero de equipo, Sato. "Creo que es impresionante, aunque es lo que esperábamos, para ser honesto. Fernando es uno de los mejores pilotos del mundo, creo que esperábamos que llegara muy rápido. Obviamente, hoy es algo nuevo para él, en el Fast Friday se rompen las 370 km/h por primera vez", indicó el nipón.
La clasificación se disputará este sábado; los nueve coches más rápidos lucharán por la pole el domingo. El próximo domingo 28 de mayo se celebrará la carrera.
Desde la cúpula de la empresa aseguraron que cuando vuelvan a las 500 Millas de Indianápolis lo harán como equipo propio, tal como ocurrió en la fallida incursión de este año.
Tras largar desde la pole position, el francés se quedó con su primer éxito en esta legendaria prueba.
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