EEn el automovilismo argentino hay ciertas actitudes que son difíciles de entender, como la reciente sanción que le aplicó la Comisión Asesora y Fiscalizadora de la Asociación Corredores Turismo Carretera a Matías Rossi por lo sucedido luego de la final del Turismo Carretera en Viedma.
En la cuarta fecha del torneo Rossi, vigente campeón de la especialidad, fue recargado con 20 segundos por excederse en el límite de velocidad durante un relanzamiento. El de Del Viso había llegado cuarto en la pista, pero fue reclasificado en el 26º lugar.
Rossi consideró que la pena fue injusta porque no se había adelantado y como referencia tenía una prueba irrefutable: el video de su cámara on board en el que se apreciaba claramente que al momento de la relargada perdía algunos metros respecto a Omar Martínez, quien estaba a su lado. Sin embargo, las autoridades deportivas sancionaron al de Chevrolet y no al de Ford, quien por una cuestión lógica también se habría excedido del límite permitido…
Para no quedar como un tramposo, Rossi hizo lo que cualquier hubiese hecho en su lugar: demostrarle a sus fanáticos y a sus patrocinadores que no hizo nada ilegal. Y lo hizo poniendo en su Twitter el video en el que se aprecia como el Gurí toma distancia en la reinicio. Pero nada fue suficiente para que haya una marcha atrás. Porque luego de tomarle declaraciones al piloto el martes por la noche, la CAF lejos estuvo de darle la razón. Por el contrario, multó a Rossi con 15.000 pesos por hacer públicas esas imágenes.
Esta acción lejos está de ser justa y, por el contrario, vuelve a pone en tela de juicio la idoneidad de aquellos que se encargan de impartir justicia en la entidad teceísta. Es que no hay que olvidar que sin la sanción, Rossi se hubiese marchado de Río Negro con un buen colchón de puntos a su favor y con este recargo esa diferencia sobre Facundo Ardusso se redujo a seis unidades. Sin olvidarse que cualquier sanción a Martínez, hubiese sacado a un Ford del podio justo en el momento en que los seguidores de la marca se sienten perjudicados por el reglamento técnico…
Párrafo aparte para Norberto Fontana, otro que también “se adelantó” en la largada de la serie en Viedma. En su caso fue castigado con una fecha de suspensión por “efectuar reclamaciones en público que afectan la imagen de la ACTC”. Como si ciertas actitudes de los responsables de la CAF y las autoridades deportivas no la afectaran…
El automovilismo nacional de pista está en crisis. Se desconoce el interés del público. La dirigencia puede reivindicar la actividad o empeorar su panorama.
Agustín Canapino marca una época. Es múltiple campeón y garantía de espectáculo por su forma de correr.
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